Carlos Galicia nació en Guadalajara, Jalisco, pero siempre ha llevado una vida de migrante. Ha vivido en muchos países de Latinoamérica pero Medellín fue la ciudad que lo enamoró. Junto con su socio Mauricio Martínez, un colombiano que lo apoyó en su proyecto, fundaron el restaurante de comida auténtica y artesanal mexicana, que siempre había sido su sueño. 

Siempre ha estado en contacto con el sector gastronómico, todo comenzó cuando era joven y acompañaba muy temprano a su abuelo a moler maíz en el 'rancho', como él lo llama, para hacer las tortillas del desayuno. A lo largo de su vida ha trabajado siempre en restaurantes y empresas relacionadas con la gastronomía, la cual considera su gran pasión. 

En su restaurante tiene la auténtica receta mexicana para hacer todas las preparaciones, y sus fieles clientes le cuentan que si él mismo no hace los platos, se pierde la esencia que los hace únicos. 

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